Bella Swan, tras vivir un vibrante y peligroso episodio en el cumpleaños que celebraron con los Cullen, se enfrenta a la dura realidad de ser mortal en un mundo de vampiros. Un accidente en la fiesta la deja herida, lo que provoca que Edward Cullen, su enamorado vampiro, se replantee su relación. Para proteger a Bella de los peligros que su existencia conlleva, Edward decide abandonarla, dejándola sumida en una profunda tristeza.

En un pequeño y sombrío pueblo de Washington, Bella Swan, una adolescente introvertida y un poco torpe, se muda con su padre. Pronto, su vida da un giro inesperado cuando se siente atraída por Edward Cullen, un misterioso compañero de clase que parece esconder un oscuro secreto. Con su piel pálida, ojos penetrantes y una naturaleza casi sobrenatural, Edward rápidamente deslumbra a Bella, quien no puede resistir el magnetismo que emana de él.