Como a la mayoría de las adolescentes, a Rose y a Lissa les gustan los chicos, van de compras al centro comercial y se sienten incomprendidas. Pero entre ellas y las demás hay una gran diferencia: son vampiresas. Lissa es una princesa que desciende de la dinastía Moroi, y Rose es la guardiana encargada de protegerla. Tras escapar de la Academia St. Vladimir, son obligadas a volver, y Rose queda bajo el estricto control de su estoico mentor, Dmitri, pero pronto se dará cuenta de que se siente atraída por él. Mientras tanto, Lissa se ve obligada a afrontar terribles peligros.
Un mundo perfecto, donde no hay guerras, racismo, tristeza o enfermedad, cada miembro de la comunidad tiene una función específica. Jonas tiene una misión para guardar todos los recuerdos, limitando así el sufrimiento de los habitantes. Pero él aprenderá que todo esto es una utopía.
La felicidad de la Navidad se convierte en un caos enorme cuando Scott Calvin (Tim Allen), también conocido como Santa, invita a sus suegros (Ann-Margret, Alan Arkin) a su casa y simultáneamente debe enfrentarse a Jack Frost (Martin Short) quien desea apoderarse del Polo Norte, su familia y Head Elf Curtis deben unirse a él para frustrar su nefasto plan.
Michael Newman, un arquitecto muy ocupado que trata de progresar y tener tiempo para su mujer Donna y sus dos hijos, compra un mando a distancia que parece que no sólo le permite controlar su televisión y su estéreo, sino, virtualmente, toda su vida. Rápidamente, Michael se vuelve adicto a este inusual poder...