Rooster Coghburn, un agente de la ley tuerto, refunfuñón y bebedor es contratado por Mattie Ross, de 14 años, para buscar al hombre que mató a su padre.
Enrique VIII de Inglaterra (1509-1547), casado con Catalina de Aragón, hija de los Reyes Católicos, se encapricha de Ana Bolena, una dama de la Corte, y decide casarse con ella. Pero, como el Papa no accede a concederle el divorcio, rompe con la Iglesia de Roma y crea la Iglesia Anglicana (Acta de Supremacía de 1534), convirtiéndose así en la suprema autoridad eclesiástica de Inglaterra. Años después, el rey acusa a Ana de alta traición y ordena que sea ejecutada
En 1880, una partida de póquer que se juega en un salón de un pueblo llamado Rincon, en el estado de Colorado, tiene un final trágico después de que uno de los jugadores sea sorprendido haciendo trampas. A pesar de los intentos por evitarlo de Van Morgen, el resto de los jugadores lincha al tahúr ahorcándolo. Tiempo después, mientras la población experimenta un desarrollo efervescente debido a la atracción que genera la fiebre del oro, muchos forasteros se establecen en Rincon. Entre ellos, Jonathan Rudd, un sospechoso predicador que va armado.
Un joven y conservador abogado (Robert Redford) es la quintaesencia de la sensatez y el sentido común. En cambio, su esposa (Jane Fonda) es un poco alocada y sólo piensa en pasárselo lo mejor posible. Ambos se enamoran al instante y se casan de inmediato; pero la dura realidad (un quinto piso sin ascensor, un apartamento como una caja de cerillas) hace que la pasión y la armonía se resientan.
Elvis surca los cielos de la paradisíaca isla de Hawaii. Es un socio de una pequeña compañía con un helicóptero. El romance, por supuesto, flota en el ambiente para el Rey... Pero el negocio puede acabarse: la suspensión de su licencia de piloto quizá ponga punto final a su trabajo.
El playboy Bernard Lawrence (Tony Curtis), un corresponsal destacado en París, engaña a tres azafatas haciéndole creer a cada una de ellas que es su novia. Consigue mantener esta situación porque tienen un horario de trabajo diferente y en distintas líneas aéreas. Los problemas surgen cuando las chicas empiezan a trabajar para líneas aéreas que tienen potentes jets, lo que les permite pasar más tiempo en París.