Un entrañable anciano y su esposa emprenden un viaje desde su pequeño pueblo hacia Tokio para visitar a sus hijos, quienes llevan una vida ajetreada y llena de compromisos. Al llegar a la bulliciosa ciudad, se dan cuenta de que sus vástagos están demasiado ocupados con sus trabajos y problemas personales para dedicarles tiempo de calidad. Con cada intento de conexión, se enfrentan a la indiferencia y la rutina de los adultos, que ya han olvidado el significado de la familia.