Un sheriff de Colorado persigue a una despiadada banda de ladrones de trenes, que se refugian en Nuevo México, territorio donde él no tiene jurisdicción. Pronto averiguará que hay alguien más interesado en capturar a esos peligrosos bandidos.
La familia de Kent Taggart muere a causa de una estampida provocada. En un enfrentamiento justo, Kent mata al responsable; a pesar de ello, las autoridades publican una orden de captura y ponen precio a su cabeza.
Un pistolero llamado Cole Thornton acude a El Dorado por encargo de poderoso terrateniente, Bart Jason. El cacique le ofrece un trabajo: expulsar de unas tierras próximas a una familia de granjeros, los McDonald. Thornton acaba rechazando el encargo a instancias de Jean Paul Harrah, el sheriff de El Dorado y viejo amigo de Cole. Tiempo después, Thornton se entera de que otro pistolero ha aceptado el trabajo que él rechazó, asi que decide regresar al pueblo para defender a los granjeros y ayudar a su amigo Harrah, que tiene problemas con la bebida.
En 1868, trescientos indios cheyennes expulsados de sus tierras vivían miserablemente en una árida reserva de Oklahoma. Tras esperar en vano una solución de las autoridades de Washington, sus jefes decidieron emprender un largo viaje hasta sus praderas natales. Pero la huida fue descubierta y la caballería salió en su persecución. En el primer combate murieron el comandante Braden y ocho de sus hombres. Cuando se supo la noticia, millares de soldados fueron enviados a combatir contra los valerosos cheyennes.
Un anciano senador del Congreso de los Estados Unidos, Ransom Stoddard, relata a un periodista la verdadera historia de por qué ha viajado junto a su mujer Hallie para acudir al funeral de un viejo amigo, Tom Doniphon. Todo comenzó muchos años atrás, cuando Ransom era un joven abogado del este que llegó en diligencia a Shinbone, un pequeño pueblo del Oeste, para ejercer la abogacía e imponer la ley. Poco antes de llegar a su destino, es atracado y golpeado brutalmente por el temido pistolero Liberty Valance.
En 1836, algunos texanos que luchaban por independizarse de México fueron sitiados en El Álamo, una misión cerca de San Antonio de Béjar, por las tropas mexicanas (más de 7.000 soldados) al mando del general Santa Anna. Entre los sitiados, unas doscientas personas, se encontraba el legendario David Crockett (John Wayne).