En un Londres sumido en un futuro cercano y distópico, la ciudad es un hervidero de caos y crimen, donde las lluvias interminables y la oscuridad perpetua crean un ambiente inquietante. En este entorno, el detective de la policía, interpretado por Rutger Hauer, se encuentra en la búsqueda de un asesino en serie que ha aterrado a la ciudad durante meses. Este criminal no solo es astuto, sino que también tiene un retorcido sentido del juego, lo que hace que el trabajo de Hauer sea aún más complejo.