En un pequeño y pintoresco pueblo, la vida transcurre tranquilamente hasta que un escurridizo escritor de novelas de misterio llega para pasar una temporada. Su presencia atrae la curiosidad de los habitantes, pero pronto sus intenciones se tornan oscuras. Cuando un lector obsesionado con sus obras comienza a recibir cartas anónimas repletas de veneno verbal, la atmósfera de tranquilidad se convierte en desconfianza y paranoia.

En el bullicioso Londres de principios del siglo XX, un excéntrico profesor de fonética, Henry Higgins, se encuentra obsesionado con un experimento audaz: transformar a una humilde florista de Covent Garden, Eliza Doolittle, en una dama de la alta sociedad, simplemente enseñándole a hablar con un acento refinado. Con su enfoque meticuloso y algo arrogante, Higgins se propone demostrar que el habla puede cambiar el destino de una persona, sin importarle las implicaciones morales de sus acciones.