Una bella y joven recién casada (Elizabeth Taylor) se va a vivir con su marido (Peter Finch) a Ceilán, donde tienen una enorme plantación de té, llamada "la senda de los Elefantes". La mujer se enamora del capataz (Dana Andrews), pero este asunto queda relegado a un segundo plano por otros acontecimientos más graves: se desata una epidemia de cólera, la sequía causa estragos y hordas de elefantes enloquecidos por la sed amenazan con devastar la plantación.
Un viejo payaso (Charles Chaplin), después de evitar el suicidio de una joven bailarina (Claire Bloom), no sólo la cuida, sino que, además, se ocupa de enseñarle todo lo que sabe sobre el mundo del teatro para hacerla triunfar. Último y melancólico film americano de Chaplin.
Sandra Demarest llega a la casa de los Caldwell y anuncia a su anfitrión, Mark, que estaba casada secretamente con su sobrino James, recientemente fallecido. Mark no la cree, pero le deja quedarse en casa mientras investiga sus afirmaciones. Julie, hermana de James, le cuenta a Sandra que ha escuchado unos extraños ruidos en el laboratorio de la casa. Llevada por la intriga, decide investigar qué ocurre en dicho laboratorio.