En una época marcada por la opresión y la búsqueda espiritual, un humilde carpintero nace en un establo de Belén, cumpliendo así una profecía antigua. Desde niño, muestra una sabiduría y una empatía que lo distinguen de los demás. A medida que crece, comienza a predicar un mensaje de amor, compasión y salvación, atrayendo a multitudes que lo ven como el Mesías prometido. Sin embargo, su mensaje choca con las autoridades religiosas y romanas de la época, quienes ven su creciente popularidad como una amenaza a su poder.