En el París de los años 60, la vida de un apático y solitario ejecutivo, François, da un giro inesperado cuando su esposa decide dejarlo. En un intento por seguir adelante, se encuentra en una situación peculiar: para lidiar con su soledad, contrata a un joven atractivo y carismático, Albert, como su "acompañante" para las noches solitarias. Aunque la relación comienza de manera puramente transaccional, pronto se desarrolla un vínculo inesperado entre ellos, lleno de momentos de risas, discusiones lúdicas y una exploración profunda de sus respectivas soledades.