En la tranquila granja de los Arable, un pequeño cerdito llamado Wilbur lucha por encontrar su lugar en el mundo. Desde su llegada, Wilbur se siente solo y anhela un amigo. Con el tiempo, forma un vínculo especial con Charlotte, una araña inteligente y cariñosa que vive en el cobertizo. Cuando Wilbur se entera de que su destino es convertirse en cena, Charlotte decide intervenir. Usando su ingenio, teje intrincadas palabras de aliento en su tela, proclamando a Wilbur como "el cerdo más maravilloso que haya existido".