En un suburbio de Los Ángeles, los años 80 son testigos de la vida aparentemente perfecta de Carol, una mujer que lleva una existencia tranquila, dedicada a su familia y rodeada de la comodidad y el lujo que el estilo de vida del lugar ofrece. Sin embargo, detrás de la fachada de esta vida idílica, Carol comienza a sentir un profundo malestar que no puede explicar. Sus síntomas son extraños: fatiga, mareos, una sensación creciente de alienación y un temor inexplicable a los productos químicos percibidos como intrusos en su entorno.