En un soleado y divertido rincón de California, una encantadora y despistada hija de un magnate marina, interpretada por Doris Day, trabaja en un innovador barco con fondo de cristal que permite a sus ocupantes observar el fascinante mundo submarino. Su vida da un giro inesperado cuando, por casualidad, se encuentra con un científico, interpretado por Rod Taylor, que investiga la vida marina y tiene planes muy distintos a los de ella. La atracción entre ambos es instantánea, pero la vida de la protagonista se complica cuando él se ve envuelto en un entramado de espionaje.