En un caluroso día de verano, un viajero errante llamado Homer Smith, un hombre de piel negra y con mucho espíritu, se detiene en un remoto convento de monjas alemanas en el suroeste de Estados Unidos. Las monjas, lideradas por la determinada hermana Agnes, han sido bendecidas con una visión: quieren construir una iglesia en su pequeño terreno, y su única esperanza es que alguien venga a ayudarles. Después de un momento de duda, Homer se encuentra inmerso en esta peculiar misión que cambiará su vida.