En la Italia de la Segunda Guerra Mundial, Pasqualino, un hombre con una personalidad bastante peculiar y convicciones algo frágiles, se mueve en un mundo de caos y desesperación. A lo largo de su vida, ha tratado de demostrar su valentía y masculinidad, pero en realidad, enfrenta una profunda inseguridad sobre su identidad y su valor como hombre. Después de que su familia es atrapada por las circunstancias de la guerra, Pasqualino es reclutado y enviado a un campo de concentración, donde la brutalidad y el sufrimiento son el pan de cada día.