En el bullicioso barrio de Little Italy en Nueva York durante los años 70, un joven llamado Charlie lucha por encontrar su camino entre la vida de la mafia y su deseo de redención. Criado en un entorno donde los valores y la lealtad a menudo se miden en términos de violencia y peligro, Charlie se siente atrapado entre su ambición de ascender en el mundo criminal y su conciencia. Su realidad se complica aún más por su amistad con Johnny Boy, un carismático pero imprudente sociópata que no tiene reparos en arrastrarlo a problemas que amenazan con consumirlo.