En esta intrincada trama de thriller psicológico, nos encontramos con un artista que ha sido víctima de un vil complot. Tras un encuentro inesperado durante una exposición, él se convierte en el blanco de un peligroso grupo de criminales que buscan sacar provecho de su talento. La vida del protagonista se transforma en una espiral de caos cuando descubre que su arte tiene un valor mucho más allá de lo que podía imaginar.

En un Berlín dividido por la Guerra Fría, un pintor estadounidense llamado Jonathan (interpretado por Dennis Hopper) se enfrenta a una crisis personal y profesional. Mientras navega por su propia desesperación, se topa con un intrigante personaje alemán, el restaurador de arte Tom Ripley (interpretado por Bruno Ganz). Este misterioso hombre no solo es un amante del arte sino también un estafador astuto que arrastra a Jonathan a un oscuro mundo de crimen y complicidad.