En el transcurso de los Juegos Olímpicos de 1936 en Berlín, el famoso detective chino Charlie Chan llega para asistir a la competición y disfrutar de un merecido descanso. Sin embargo, su relax se ve rápidamente interrumpido cuando un misterioso asesinato sacude el evento deportivo. El reputado atleta japonés, quien es considerado un favorito para llevarse la medalla de oro, es encontrado muerto en circunstancias extrañas, despertando la conmoción entre los deportistas y organizadores.