En la intensa arena política de 1960, dos figuras emergentes del Partido Demócrata compiten en una feroz batalla por la nominación presidencial. En un rincón, tenemos a John F. Kennedy, un joven senador de Massachusetts lleno de carisma y una visión refrescante para un país en transformación. En el otro lado, se encuentra Hubert Humphrey, un experimentado político de Minnesota, que representa la voz progresista dentro del partido, ambicioso y decidido a promover sus ideales en una nación que se tambalea entre el cambio y la tradición.