En una lujosa casa de Manhattan, Meg y su hija Sarah están listas para comenzar una nueva vida, alejándose de un pasado complicado. Todo parece ir viento en popa hasta que un grupo de intrusos armados irrumpe en su hogar. Lo que se suponía que sería un refugio se convierte en una trampa mortal. Para salvarse, madre e hija se ven obligadas a refugiarse en una sala de pánico, una pequeña habitación blindada diseñada para proteger a sus ocupantes de todo tipo de amenazas.