En una tranquila y pintoresca suburbia de Australia, la familia Kerrigan vive en un modesto hogar, que para ellos es un verdadero castillo. Con un espíritu indomable y una relación muy unida, los Kerrigan disfrutan de la vida sencilla, aunque enfrentan un gran desafío: un desarrollo inmobiliario que amenaza con desplazar su hogar. La historia se centra en Darryl, el patriarca de la familia, un hombre de trabajo y con un corazón enorme que está decidido a no dejar que las autoridades se salgan con la suya. Con la ayuda de su esposa, sus tres hijos y un grupo de amigos entrañables, Darryl inicia una lucha legal contra el gobierno y sus ambiciosos planes.
A medida que avanza la trama, la familia se enfrenta a situaciones hilarantes y entrañables, desde reuniones con abogados ineptos hasta estrategias improvisadas para defender su hogar. La película explora temas como la pasión por la familia, la justicia y lo que realmente significa el concepto de "hogar". Con un humor que mezcla la comedia con momentos emotivos, la familia Kerrigan se convierte en un símbolo de resistencia frente a la adversidad.
En medio de momentos absurdos y diálogos memorables, se destaca la esencia de la vida cotidiana y el profundo amor que une a los Kerrigan. Esta historia se convierte en una celebración de la identidad y la lucha por lo que uno ama, convirtiendo un simple hogar en la verdadera fortaleza de la familia. Al final, el corazón y la determinación de los Kerrigan nos recuerdan lo que realmente importa.