En un pintoresco pueblo llamado Villa Quién, todos los habitantes están emocionados por la llegada de la Navidad. Sin embargo, en lo alto de una montaña vive un ser solitario y amargado que odia esta festividad: el Grinch. Con su corazón encogido y su desprecio por la alegría navideña, observa con desdén cómo los Quiéns celebran con entusiasmo, decorando sus casas, cantando villancicos y preparándose para el gran día.
Cansado de la felicidad desbordante de los Quiéns, el Grinch decide llevar a cabo un plan maestro para robarles la Navidad. En la noche de Navidad, disfrazado de Santa Claus, baja a la aldea con un saco gigante y un trineo. Su intención es despojar a los Quiéns de todos sus regalos, adornos y alimentos. Sin embargo, a medida que avanza en su misión, se da cuenta de que la verdadera esencia de la Navidad va más allá de los obsequios materiales. Cuando ve a los Quiéns unir sus voces en celebración, a pesar de no tener nada que los adorne, descubre que la felicidad y el amor son los verdaderos regalos de la temporada.
En un giro inesperado, el Grinch experimenta un cambio de corazón que lo lleva a devolver todo lo que ha robado y a unirse a los Quiéns en su celebración. Con un desenlace cálido y conmovedor, esta historia demuestra que la Navidad no se trata solo de lo material, sino del espíritu de comunidad y amor que puede transformar incluso al más cínico de los corazones.