En un pequeño pueblo italiano, un sacerdote de carácter feroz y enérgico se enfrenta a las realidades del mundo contemporáneo. Con su característico sentido del humor y un fervor religioso que lo lleva a situaciones absurdas, este cura no es solo un líder espiritual; es un hombre apasionado que no teme desafiar las normas sociales. Su mayor rival es el alcalde del pueblo, un comunista convencido que se opone a sus ideales. A pesar de sus diferencias, la animosidad entre ambos se convierte en una especie de juego de ajedrez, donde la fe y la ideología chocan de manera hilarante.
Un día, un grupo de jóvenes del pueblo se ve involucrado en la creación de un centro de reunión para la juventud, lo que desencadena una serie de eventos cómicos y reflexivos. A medida que la tensión entre el cura y el alcalde aumenta, ambos se ven obligados a cuestionar sus puntos de vista y a reconocer sus respectivos papeles en la comunidad. A través de peleas, debates y anécdotas, cada uno intenta mantener su posición mientras busca el bien común.
Con un elenco entrañable, la narrativa mezcla la comedia con momentos emotivos que resuenan con el público. Las peripecias del cura y del alcalde no solo destacan las contradicciones de la vida en ese pequeño pueblo, sino que también ofrecen una reflexión sobre la fe, la política y la amistad. Al final, la risa resulta ser el mejor camino hacia la comprensión y la unidad.