En un pequeño pueblo de Carolina del Norte, una joven artista llamada Madeleine llega con su esposo, un vendedor de arte, para visitar a la familia de él. Desde el principio, la atmósfera es un poco tensa, marcada por las diferencias culturales entre la vida urbana en la que Madeleine ha crecido y la vida rural de su familia política. La película se adentra en la dinámica de una familia peculiar y cómo las interacciones entre ellos revelan secretos, anhelos y desamor.
Madeleine, con su espíritu abierto y curioso, hace un esfuerzo por conectar con su suegra, Evelyn, una mujer tradicional que lleva las riendas del hogar. Su esposo, George, enfrenta un tira y afloja emocional mientras supervisa la relación entre su esposa y su familia. Además, la llegada de su hermana, la joven embarazada Ashley, añade más tensión al ambiente, ya que su vida está marcada por la inseguridad y la búsqueda de estabilidad.
A medida que Madeleine se sumerge en la vida de sus suegros, se da cuenta de que cada miembro de la familia tiene su propia historia que contar. La película utiliza momentos de humor sutil y dolorosos para explorar temas como el amor, la pérdida y la búsqueda de conexión humana. Con una cinematografía hermosa y personajes memorables, este retrato íntimo pone de manifiesto las complejidades de la vida familiar y cómo, a veces, las conexiones más profundas pueden surgir en los momentos más inesperados.