En la vibrante y atrapante París de los años 70, la historia sigue a un exconvicto que acaba de salir de la prisión, con la esperanza de reintegrarse a la sociedad. Sin embargo, su pasado lo persigue y pronto se encuentra involucrado en un plan ambicioso de robo. Al mismo tiempo, un policía obstinado, decidido a hacer justicia, comienza a atar cabos y sospecha que hay un gran golpe en marcha.
El destino del exconvicto se entrelaza con un ladrón profesional, un maestro del arte de la suplantación, que está dispuesto a arriesgarlo todo por un golpe magistral. Juntos, trazan un meticuloso plan para robar una valiosa carga de joyas, pero su camino está lleno de obstáculos inesperados y traiciones. Con cada movimiento, la tensión va en aumento, y la línea entre el bien y el mal se vuelve cada vez más tenue.
A medida que se acercan al día del robo, cada personaje entra en un complejo juego de lealtades y decisiones morales. Los momentos de calma se convierten rápidamente en explosiones de acción, mientras siguen las sombras de un pasado que amenaza con desmoronar sus planes. La historia se convierte en un intenso juego del gato y el ratón, donde no solo se lucha por el botín, sino también por la salvación personal. En este mundo donde la traición acecha, la lealtad se pondrá a prueba y la redención podrá ser la única salida. La atmósfera es casi palpable, y cada escena está impregnada de una tensión que mantiene al espectador al borde de su asiento.