En una espléndida mansión de Nueva York, la vida de una familia adinerada se ve sacudida cuando la madre, una mujer de gran carácter y modales exagerados, decide hacer una visita sorpresa para conocer a la prometida de su hijo. Pero en lugar de la nuera perfecta que había imaginado, se encuentra con una joven desenfadada y un tanto torpe que no tiene ni idea de cómo encajar en la alta sociedad.
La novia, con su encanto natural y su forma despreocupada de ver la vida, crea un auténtico caos en la vida ordenada de la familia. A medida que las interacciones entre los personajes se vuelven cada vez más hilarantes, la madre intenta desesperadamente restablecer el control y la imagen que quiere proyectar. Pero, por supuesto, su intervención solo añade más enredos a la situación. Mientras más trata de imponer su mundo sofisticado, más se reafirma el espíritu libre de la novia, quien, sin quererlo, comienza a mostrar a todos que la autenticidad y la diversión pueden ser una mejor opción que la rigidez de las apariencias.
Con un juego de identidades, confusiones románticas y situaciones cómicas al borde del desastre, la familia pronto se da cuenta de que el verdadero amor no se mide por etiquetas sociales. Tener las riendas de la vida no significa tener el corazón lleno, y en esta vorágine de malentendidos, terminan aprendiendo una lección divertida sobre la importancia de ser uno mismo.