En una calurosa mañana de un domingo judío, Dani, una joven estudiante, se prepara para asistir a un shivá, que es un período de luto. A primera vista, parece ser un evento familiar típico, pero pronto se convierte en una montaña rusa emocional. Mientras se encuentra rodeada de parientes ruidosos y chismes interminables, Dani se siente atrapada entre la presión de cumplir con las expectativas familiares y su complicada vida personal.
Lo que debería ser un simple ritual se torna un caos cuando se encuentra cara a cara con su ex amante, que también aparece en el shivá, generando tensiones y recuerdos complicados. Para colmo, Dani también se enfrenta al desasosiego de su madre, que constantemente le recuerda que a su edad debería estar planeando su futuro, en lugar de asistir a estos eventos.
A medida que avanza el día, las interacciones entre sus familiares no solo revelan los dramas propios de cada uno, sino que también desnudan las inseguridades de Dani, que se siente atrapada en un mundo donde el juicio es constante. Todo esto, en medio de la ambientación claustrofóbica del shivá, crea un ambiente cargado de risas incómodas y situaciones absurdas.
En última instancia, la separación entre lo que se espera de ella y lo que realmente desea se vuelve abrumadora, lo que la impulsa a replantearse su identidad y sus decisiones mientras el reloj avanza hacia una confrontación inevitable.