En la antigua Roma, dos hermanos gemelos, hijos del dios Marte y la princesa Rea Silvia, son abandonados al nacer en el río Tíber. Rescatados por una loba, son criados en la naturaleza antes de ser descubiertos por un pastor que los lleva a su hogar. A medida que crecen, Romolo y Remo se convierten en jóvenes fuertes y valientes, con una fuerte conexión con su destino y el deseo de construir una ciudad que honre su legado divino.