El periodista Steve (Paul Newman) y Samantha (Joanne Woodward) coinciden en un vuelo a París y, una vez en la ciudad, tras unos equívocos con la identidad de la mujer, acabarán enamorándose.
Un reportero fotográfico se ve obligado a permanecer en reposo con una pierna escayolada. A pesar de la compañía de su novia y de su enfermera, procura escapar al tedio, observando desde la ventana de su apartamento con unos prismáticos lo que ocurre en las viviendas de enfrente. Debido a una serie de extrañas circunstancias empieza a sospechar de un vecino cuya mujer ha desaparecido.
El reino de Marshovia está asfixiado por las deudas. La única solución sería que una viuda millonaria destinara su fortuna a sacar al estado de una situación tan apurada. Con tal propósito, el rey le pide a un conde que vaya a verla y la corteje.
Terminada la Segunda Guerra Mundial, Jerry Mulligan (Gene Kelly), un pintor americano, se queda en París y expone sus cuadros, que nadie compra, en Montparnasse. Un día tiene la suerte de conocer a una americana millonaria que decide promocionarlo. Al mismo tiempo, conoce a una dependienta y se enamora de ella.