En el tumultuoso siglo XV, Francia se encuentra atrapada en una guerra devastadora contra Inglaterra. En medio de este caos, una joven campesina llamada Juana, dotada de una fe inquebrantable y visiones celestiales, siente que está llamada a cambiar el rumbo de su país y restaurar el trono francés. Convencida de que su misión divina es liberar a su nación, Juana se adentra en el campo de batalla, enfrentándose no solo a enemigos armados, sino también a la incredulidad de sus compatriotas.
A medida que Juana se presenta ante el delfín Carlos, el heredero al trono, logra convencerlo de que ella puede llevarlo hacia la victoria. Su valor y determinación inspiran una renovada esperanza en el pueblo, y su presencia en el ejército se convierte en un fenómeno. Sin embargo, la joven guerrera no solo lucha contra los ingleses; también debe lidiar con las intrigas políticas y la desconfianza de quienes la rodean. A medida que sus triunfos en el campo de batalla crecen, también lo hacen los enemigos que la ven como una amenaza.
La historia culmina en un trágico y poderoso enfrentamiento con la Iglesia y los poderes de la época, donde Juana se convierte en un símbolo de fe, valentía y sacrificio. Atrapada entre su devoción y las duras realidades políticas, su legado perdurará a través de los siglos, cuestionando cómo una joven puede cambiar el destino de una nación.