En un mundo donde la competencia espacial se intensifica y las naciones luchan por demostrar su poderío tecnológico, un diminuto país europeo llamado Grand Fenwick decide que es el momento de hacerse notar. Después de leer un artículo en la prensa sobre la carrera espacial entre Estados Unidos y la Unión Soviética, los ministros de este minúsculo reino deciden que la única forma de ser relevantes es lanzar su propia misión a la Luna. Con recursos minimalistas y una buena dosis de improvisación, diseñan una cohete que es a la vez cómico y endeble, utilizando todo lo que tienen a mano.
Con la ayuda de un brillante pero poco convencional científico, empiezan a construir su nave espacial. La confusión aumenta cuando sus planes llaman la atención de las superpotencias, que optan por involucrarse en la situación de maneras que van desde lo absurdo hasta lo hilarante. La historia se convierte en un enredo de espionaje, intriga política y malentendidos cómicos, mientras los envían a una misión que nadie esperaba que tuviera éxito.
A medida que se adentran en su aventura, los personajes se verán obligados a replantearse qué significa realmente la victoria y el progreso. Entre risas y giros inesperados, el pequeño país de Grand Fenwick se convierte en el centro del escenario en la gran obra de la carrera espacial, demostrando que a veces los sueños más locos pueden convertirse en una realidad… o al menos en un gran espectáculo.