En un barrio humilde de una ciudad en los años 20, un niño de apenas cinco años, huérfano y abandonado, es dejado a su suerte por su madre, quien no puede hacerse cargo de él. Sin embargo, el destino le tiene preparada una inesperada conexión. Un icónico vagabundo, que vive la vida al límite y lucha contra las adversidades del sistema, encuentra al pequeño en la calle y decide llevarlo consigo. Inicialmente, la relación entre ambos es caótica; el vagabundo apenas puede cuidar de sí mismo, pero pronto comienza a desarrollar un fuerte vínculo con el niño.
A medida que pasan los días, el vagabundo se convierte en una figura paterna para el niño y juntos forman un curioso pero entrañable dúo. La vida no es fácil, pero se las arreglan para sobrevivir, sacando sonrisas y risas en medio de la miseria. Cada pequeño triunfo en su día a día, desde robar un pan hasta hacer reír a un grupo de extraños, les acerca más e imprime una chispa de esperanza en sus corazones.
Sin embargo, la felicidad de la pareja se ve amenazada cuando las autoridades intervienen, tratando de separarlos y devolver al niño a un orfanato. La historia se convierte en una entrañable lucha por la familia y la libertad, donde el amor y la lealtad desafían las convenciones sociales de la época. En su travesía, aprenderán que, aunque la vida es dura, el verdadero tesoro reside en el afecto y la conexión que han creado.