En las calles polvorientas de São Paulo, un niño de apenas diez años, Pixote, se convierte en el rostro de la cruda realidad de la vida en la calle. Abandonado y atrapado en un sistema que parece haberlo olvidado, se ve forzado a lidiar con la dura supervivencia en un mundo que no muestra piedad. La historia empieza cuando es detenido y enviado a un centro de reeducación donde, lejos de encontrar protección, se sumerge en un entorno violento y corrupto. Allí se cree que hay algún tipo de rehabilitación, pero lo que realmente se encuentra es un microcosmos de brutalidad y desamparo.
A medida que Pixote se adapta a este nuevo entorno, forma lazo con otros chicos, cada uno con sus propias historias trágicas, mientras intentan navegar entre las luchas internas y las injusticias del sistema. La situación se vuelve aún más complicada cuando se ven arrastrados al crimen y la violencia, impulsados por la necesidad de sobrevivir y la búsqueda de un sentido de pertenencia. Al enfrentar la traición y la pérdida, Pixote comienza a cuestionarse su lugar en el mundo y si realmente hay un camino hacia la redención.
Este retrato impactante y desgarrador de la infancia en la pobreza y el abandono revela una cruda realidad social, invitando al espectador a reflexionar sobre las condiciones que llevan a los jóvenes a tomar decisiones desesperadas en una sociedad que los margina. La vida de Pixote es una montaña rusa de emociones que deja una profunda huella en el corazón.