En el vibrante mundo de los años 50, una mujer mayor con una sorprendente dosis de carisma y un espíritu indomable irrumpe en la vida de una corporación automotriz. Ellen, una accionista minoritaria, llega al encuentro de los grandes ceremoniosos en la sala de juntas, lista para tomar la palabra y desafiar la burocracia cuadriculada que domina el lugar. No es sólo otra anciana que se sienta y observa; está decidida a poner en jaque el funcionamiento de la empresa y a desenmascarar la corrupción y la avaricia que la rodean.
Con su ingenio y humor chispeante, Ellen empuja a los ejecutivos, que solían tener el control absoluto, a reconsiderar sus prioridades, haciéndoles comprender que el verdadero valor no se mide solo en números. Mientras ella provoca una serie de hilarantes y reveladoras situaciones, va interrogando las decisiones de la compañía, llevando a sus compañeros accionistas a un lado menos conformista. Pero no todo es risa; a medida que se adentra en el entramado de la empresa, se enfrenta a la feroz oposición de los directivos que están demasiado cómodos en sus sillones de cuero. Sin embargo, con su determinación y un toque de picardía, Ellen no solo se esfuerza por hacer justicia, sino que también descubre el verdadero poder de su voz en el mundo masculino de los negocios.
En esta comedia inteligente y llena de corazón, la lucha de Ellen va más allá del dinero; es una celebración de la valentía, la amistad y la importancia de hablar cuando lo que está en juego es más que solo un automóvil de lujo.