En una calurosa y húmeda ciudad del sur de Estados Unidos, un renombrado abogado de derechos humanos, interpretado por Sean Connery, se ve arrastrado a una intrincada red de conspiraciones y secretos oscuros. Todo comienza cuando se le solicita que defienda a un hombre condenado a muerte por la brutal violación y asesinato de una niña. Este hombre, al que interpreta Laurence Fishburne, se mantiene firme en su inocencia y, con la ayuda de su abogado, revela detalles que apuntan a un complot más grande y retorcido.